La misma pregunta puede estar en la mente de todos los consultores de marketing inmobiliario últimamente. Porque si bien encontrar clientes requiere habilidad en condiciones normales, tenemos dificultades para encontrar una cartera para presentar al cliente en el punto al que hemos llegado. Todos sabemos la razón de esto más o menos: el inesperado movimiento alcista en el tipo de cambio en mayo de 2018 y la contracción en la oferta de vivienda tras el proceso de pandemia que comenzó en enero de 2020 y aún continúa.
El stock de vivienda actual en 2018 se erosionó rápidamente como resultado de las campañas de préstamos para vivienda lanzadas por los bancos públicos en 2020. La reducción de la oferta como resultado de la falta de producción de vivienda nueva al nivel deseado desencadenó el aumento de los precios de la vivienda. Luego, en el punto al que hemos llegado al final del período turbulento que vivimos desde hace unos meses, hemos visto la consolidación de los precios inmobiliarios. No esperábamos para nada la guerra Rusia-Ucrania… Ahora, las necesidades de los huéspedes que vienen a nuestro país parecen aumentar nuestro apetito, por un lado, e inflar los precios por el otro. ¿Continuará esta situación o el coche de Cenicienta volverá a convertirse en calabaza?
Incluso si la producción de casas para satisfacer las necesidades se inicia hoy, el proceso se completa después de 2-3 años en las mejores condiciones. “Entonces, ¿quién hará esto? ¿Qué están planeando nuestros contratistas al respecto? Si dices, no sé, pero hay una cosa que sé que no somos indefensos… No olvidemos que somos una parte indispensable del mundo global y hay métodos que nunca hemos probado. El crowdfunding inmobiliario puede ser un ejemplo de esto en el punto de recaudación de fondos financieros.
Como se sabe, el crowdfunding recauda dinero de más de una persona o fuente para financiar un nuevo proyecto y, a menudo, utilizan las redes sociales para lograr que las partes interesadas participen en el crowdfunding. Lo que esencialmente hace el crowdfunding es eliminar el tedioso y largo proceso entre emprendedores e inversionistas. En lugar de esperar la oportunidad de presentar su proyecto a un equipo de inversores, los emprendedores pueden presentar sus propuestas directamente al público para obtener el apoyo financiero de una audiencia más amplia. En otras palabras, el tiempo de espera entre la propuesta de un proyecto y la recaudación de fondos para hacerlo realidad se reduce significativamente. El crowdfunding proporciona un incentivo como el acceso exclusivo o la fijación de precios en el lanzamiento del proyecto.